Los activos tangibles son bienes físicos que posee una empresa y que se pueden ver y tocar. Incluyen elementos como maquinaria, edificios, vehículos y equipo. Estos activos son importantes para las operaciones diarias de una empresa y suelen depreciarse con el tiempo. El valor de los activos tangibles se registra en el balance general y es clave para determinar el valor total de una empresa.